miércoles, 22 de abril de 2020

CAFÉ CONCERT

En los años 60 y 70, se recupera en américa latina el ambiente bohemio de los café-concert parisinos, donde se hacía música, performance, danza, humor. Locales pequeños, decorados con una estética moderna donde se juntaban intelectuales y artistas. Es la época de los cines clubes, con proyecciones de las nuevas corrientes cinematográficas. El existencialismo, donde ambos sexos debían tener el mismo protagonismo y las mismas libertades  y derechos. Era una época donde el cuestionamiento a las tradiciones institucionalizadas influía en la vida cotidiana, se hablaba de la alienación, de los cambios sociales, de la pareja, la sexualidad, la familia. Los café concert reproducían las imágenes tantas veces retratadas  por pintores como eduard monet, edgar degás, loutrec. La belle epoque francesa. Los cafë concert italianos, alemanes o austríacos o los centroeuropeos que adquirieron renombre entre las dos guerras mundiales. En río de janeiro, en garota de ipanema donde vinicius de moraes compone la canción homónima. La fusa en punta del este, Uruguay. En buenos aires, la botica del ángel donde actuaron nacha guevara; susana rinaldi, les luthiers entre muchos otros. Y en córdoba; bestiario, el ángel azul o elodía. En esta última sala, elodía, mi amiga y yo, que éramos amigas de los dueños, un grupo de arquitectos, servíamos copas los fines de semana y participábamos de todos los selectos espectáculos en directo. Aquí escuchamos a nacha guevara, vinicius, toquiño y otros artistas que venían a buenos aires y completaban su gira en córdoba.

No hay comentarios:

Publicar un comentario