El viaje fue magnífico, las carreteras sinuosas y bordeando precipicios , con cascadas gigantescas que aparecían de repente entre las montañas azules . La profundidad del paisaje reflejado en el agua de los fiordos, duplicaba la hermosura y la magestuosidad de una naturaleza virgen. El verde salpicado de valles con caseríos de maderas rojas, aislados de toda civilización conocida y disfrutando del misterio que albergan estas lejanías- Los típicos "gar" los conjuntos de casas; galpones, establos de los campesinos noruegos, que los resguardan de las tormentas de nieve en invierno, de las horas de oscuridad, de los hielos y de los animales salvajes como los osos que merodean entre estos bosques. Aunque al llegar la primavera, la vida fluye como sus cascadas de agua, los renos y cervatillos salen a pastar y se dejan ver con sus crías, bebiendo en sus lagos o cruzando las carreteras estrechas entre poblado y poblado. Paramos muchas veces a comprar café, golosinas, bocadillos, zumos y pequeños recuerdos, paula y antonio llevaban una colección de trofeos. Cada tantos kilómetros, un puesto de samis (habitantes autóctonos del norte de noruega), que vendía sus artesanías, jerseys, mitones, guantes , alfombras de lanas vírgenes. Objetos tallados en aspas de renos, y un sinnúmero de detalles artesanales.Recordamos con mario y emilia, nuestros viajes por el norte de argentina y bolivia hasta la quebrada de humahuaca, donde los habitantes originarios de estas zonas andinas, los quechuas, venden también sus artesanías. Yo me considero una enamorada de todos los elementos de arte que caracterizan a las culturas primitivas y tengo que decir que no puedo pasar por estos mercados tan singulares sin llevarme conmigo algunos tesores que hasto hoy colecciono.
CRUZAMOS en barco
"ferries" para acceder a Bergen. Los noruegos son un pueblo de
fuerte tradición marinera, desde épocas vikingas, el mar fue escenario de
muchas de sus epopeyas. El comercio desarrollado generó
un centro neurálgico en el puerto de Bergen, segunda ciudad en importancia de Noruega. La federación de comerciantes
alemanes que se establecieron en esta ciudad en el siglo xiv dio paso a la
formación de la liga hansiática, encargada de gestionar y monopolizar el
comercio del . Pescado en toda la región. Esta colorida ciudad entre
montañas y fiordos era nuestra estrella, la perla en este
viaje. Queríamos disfrutarla
porque sabíamos de la complejidad que ofrecía llegar hasta aquí, sobre todo
para Emilia, viviendo en Argentina. Encontramos una cabaña de
madera junto a un lago, tal y como lo habíamos pensado. Una casita en
medio del bosque con cuchetas, una cocina con todo lo necesario, un baño con
duchas de agua caliente y no muy lejos de allí, bordeando un sendero, una sauna
común que podríamos compartir con algún viajero que como nosotros
eligiera, para estos días de verano, utilizar estas selectas
instalaciones. Hicimos nuestra comida caliente
, habíamos comprado salmón, " patata nuevas ", y otras delicias
típicas de la zona.
Nos dimos un suculento banquete
y salimos a caminar para hacer familiar este rincón del mundo tan lejano y tan
amable.
Vimos ardillas pájaros diversos
y hasta una especie de comadreja con sus crías, que desapareció entre las
bayas. Como la luz persiste y los atardeceres no dan paso a la noche, decidimos
dormir bajando las cortinas cuando el reloj marcaba la medianoche.
Por la mañana, desayuno
suculento y a conocer bergen. Nos dirigimos al barrio
de bryggen . Las casas de madera de colores, rojo, amarillo, blanco junto a las
maderas patinadas por el tiempo que daban cuenta de su longevidad Y fortaleza. Conocimos la casa
original que albergó la liga hansiática. La fortaleza medieval de
bergenhus, junto al puerto.
La catedral de san olof,
"bergendomkirke" Hasta que llegamos al antiguo
embarcadero, en frente del barrio de bryggen, el famoso mercado de pescado
"fisketorget" donde compramos y comimos gambas "rakor", y
nos tomamos unas buenas sopas de pescado mientra paula y antonio hacían su
compra diaria de fresas, especialidad de bergen en esta época. Los puestos de pescado son
un verdadero reclamo de la zona, bodegones pantagruélicos de frutos recién
sacados del mar.
Ya de regreso pasamos a visitar
el fiordo más largo y profundo de noruega el fiordo Sogn. Por el camino, contamos
historias sobre los alces "alg",los renos "renar" y sobre
los animales que viven dentro de estos bosque disfrutando de las estaciones del
año. Hablamos de los cuentos de
vikingos y la abuela leyó poemas sobre las auroras boreales y sobre la vida de
los habitantes que pueblan el polo norte, emilia había llegado desde el polo
sur de argentina hasta el polo norte, donde hoy, tiene un viznieto, nacido en
estas latitudes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario