sábado, 22 de marzo de 2025

La Liga Hanseática

 








La abuela Emilia quería conocer los hitos más importantes de la cultura del Báltico, con la mítica idea de los vikingos surcando los mares helados y navegando a través de los ríos caudalosos que bajan de los fiordos. Soñaba con las noches doradas de sus auroras boreales y las embarcaciones de troncos y teito, al igual que sus iglesias y sus míticas cabañas. Con esta mitología histórica en la cabeza nos llevó a conocer el museo de barcos "Vasa Museum" o la Liga Hanseática, cuya sucursal en Bergen conocimos y firmamos sus libros de visitantes. Nos narró las historias de esa Liga fundada en Lübeck en el año 1356; fue la primera reunión de las ciudades comerciales que formarían la unión, formalizando oficialmente la "Liga Hanseática" dos años más tarde, en 1358. Fue una federación comercial y defensiva de comunidades y comerciantes alemanes en el mar Báltico y de ciudades que ahora se encuentran en los Países Bajos, el norte de Alemania, Suecia, Polonia, Letonia y Estonia. La lengua franca usada a lo largo de toda la Liga Hanseática fue el bajo alemán medio. Tenía su sede en Lübeck. A través del libre comercio y de una burguesía empresarial, ciudades portuarias unas y costeras otras, al lado de importantes ríos navegables, lograron un alto nivel de prosperidad, algunas de las cuales siguen mostrando valiosas características culturales y arquitectónicas. La creciente independencia económica y las conexiones familiares entre influyentes familias de mercaderes condujeron a una mayor integración política y comerciales estandarizadas entre las ciudades de la Liga. Habían llegado los barcos hasta la ciudad rusa de Novgorod remontando los ríos navegables y se fundaron ciudades en torno al Báltico: Lübeck, Rostock, Wismar, Stordswald, Stettin, Danzig, Elbing, desarrollando lazos muy fuertes que se fueron consolidando legalmente como gremios y entidades económicas muy sólidas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario